Buna, la iniciativa

Hace ya más de una década que descubrimos que nuestra idea de tener un negocio de café había comenzado a quedarse corta. Esta infusión ancestral, antaño concebida por unos como elixir sagrado por sus efectos estimulantes, para nosotros fue tan sólo un punto de partida. El grano de café nos llevó a expandir y enriquecer nuestra visión del mundo y de lo que nosotros, como pequeña empresa, podríamos llegar a ser. 

Nuestro interés en el café, su siembra y su cosecha, nos empujó a recorrer el país. Sus territorios y lo que en ellos ocurre dibujaron rutas a seguir que para nosotros siempre fueron insospechadas. Estos viajes nos permitieron adquirir un conocimiento profundo sobre la biodiversidad y los ecosistemas, y nos llevaron a darnos cuenta de lo urgente que es su conservación para que podamos preservar la vida, la vida de todos los seres vivos, nuestra vida.

Una consecuencia casi inmediata, casi lógica, de dichos hallazgos fue nuestro encuentro con el trabajo agroecológico. Al conocer este sistema agrícola descubrimos que en él se hace uso de una sabiduría natural, innata y oculta en el entorno, capaz de dar los mejores frutos: un producto de altísima calidad, la regeneración del suelo fértil, la posibilidad de brindar trabajo justo a los productores, la oportunidad de seguir generando vida. Un círculo virtuoso. Vida que genera vida, que genera vida ad infinitum. La práctica agrícola que es ecológica se trata de una sola cosa: respeto. Respeto al medio ambiente y respeto a todo lo que está vivo.

Hoy queremos reafirmar que Buna es más que una marca que vende productos ricos. Nuestra misión es más amplia y diversa. Trabajamos con productores que ejecutan prácticas ecológicas, sí, pero también llevamos la agroecología a nuevos sitios y comunidades que deseen establecer un compromiso de cuidado y conservación del medio ambiente a largo plazo. Y somos serios en ello: buscamos generar sistemas agroforestales, incrementamos la productividad de las parcelas, reducimos los costos de producción, tenemos planes de indicadores que evalúan qué tan bien estamos haciendo nuestro trabajo. No deseamos quedarnos en el terreno de la palabra. Sabemos que el deterioro sólo puede combatirse con acciones.

Otra parte indispensable e igual de importante en Buna es el factor humano. Para nosotros es imposible separar la producción del respeto a quienes la llevan a cabo. El bienestar de las comunidades y el interés de las nuevas generaciones en la conservación sólo puede sostenerse con pagos justos. Es imposible cuidar la tierra si la mano que la trabaja no recibe también ese cuidado. Intentar regenerar y conservar el medio ambiente sin salarios dignos es como tratar de sembrar en un campo infértil: en un espacio en tales condiciones, nada podrá crecer. Por eso, en Buna el comercio justo y el contacto honesto y equilibrado con los trabajadores es el núcleo de todo.  

Hoy queremos invitarte a ser parte de este ciclo de vida. Al adquirir una suscripción a nuestros productos te conviertes en el último eslabón de nuestro círculo virtuoso. Da clic en esta liga para aclarar cualquiera de tus dudas o para indicarte cómo puedes involucrarte más, si es tu deseo. Para nosotros es un sueño que cada vez más personas como tú se sumen a este proyecto de bienestar y vida. Sólo juntos podemos lograrlo. Acompáñanos.